Maternidad: viajar sin niños

Buenos días!

Los que habéis visto imágenes de mi verano en Instagram ya sabéis que he pasado parte de mis vacaciones en Perú. 



Hacía ya casi tres años que teníamos el viaje en mente y, desde el principio, nos planteamos si ir solos o en familia (aunque al principio ni siquiera estaba Martín). Al final, por diversas circunstancias, y  porque valoramos los pros y los contras, nos fuimos sin niños gracias a que sus abuelos y tíos de Cádiz se ofrecieron a quedarse con ellos.

Es el primer viaje que hacemos solos desde que tenemos peques, aunque eso no quiere decir que ser padres nos haya privado de viajar. Ya os conté aquí cómo viajo con niños y os digo siempre que merece la pena ir con ellos. 

Nuestra experiencia viajando solos ha sido muy buena, Evidentemente, como todos los padres, nos ha venido bien un respiro: dormir sin interrupciones, poder salir a cenar tranquilamente a restaurantes que no tienen zona infantil, tener tiempo para leer o dormir durante un viaje en avión....

Creo que los peques también han estado muy bien, y me imagino que también habrán descansado de nosotros. Por mi parte, la experiencia ha sido positiva, y, aunque tardaremos en repetir porque dejarlos es mucho trabajo para quien se los queda, no será la única vez que hacemos esto.

Por si estáis pensando hacer lo mismo pronto, aquí tenéis unos consejillos que pueden ayudaros a que todo salga bien:


1. Intentad que las personas (familia o amigos) con los que váis a dejarlos no sean las que diariamente os ayudan ya con los niños. En nuestro caso mis padres viven a 800 km y habitualmente no los ven tanto como quisieran. Por eso, lo han cogido con muchas ganas, con la ilusión de compartir con ellos una rutina diaria y con la certeza de que, cuando el viaje acabe, tendrán su merecido descanso. Si ya dejáis a los peques con los abuelos durante todo el curso, tal vez no es buena idea dejarlos también en vacaciones, aunque es una opinión totalmente personal.

2. Contadles lo que va a pasar, aunque sean muy pequeños, aunque incluso creáis que no os entienden, porque nunca está de más y sí que puede estar de menos. Explicadle dónde os váis, dónde se van a quedar y lo bien que se lo van a pasar. Eso sí, consejo totalmente personal, contádselo con poca antelación (uno o dos días antes) para que no tengan tiempo de darle demasiadas vueltas y de sufrir pensando cuándo y/o cómo va a ser.

3. No os pongáis nerviosos ni tristes delante suya antes de iros. Mostráos confiados, contentos y seguros. Sé por experiencia propia, porque mis padres me han dejado muchas veces con mis abuelos para viajar, que para el niño no tiene por qué ser nada traumático, sino más bien una fiesta y algo emocionante por novedoso y diferente.

4. Regalos: sí! Muchos regalos, especiales, exóticos y grandes. La promesa de que váis a volver con regalos va a alimentar la ilusión, la emoción y los nervios. Es la recompensa por portarse bien, la compensación por haber sido valiente y la motivación para pensar una vez los abren: "Mamá, papá, iros más a menudo que esto es la bomba". Os lo aseguro, no soy nada partidaria de la exageración en los regalos en general, pero sí que creo que un viaje con regalazos es para los niños mucho más motivador.



5. Dejad libertad a los que se quedan con vuestros hijos: no los agobiéis con más normas ni exigencias que las necesarias, que generen ellos su propia rutina. A la vuelta, tened mucha paciencia, es posible que vuestros hijos hayan perdido algunas prácticas diarias que os haya costado tiempo conseguir, pero, como se dice siempre, los abuelos están para malcriar. Todos nos merecemos unas vacaciones, y los peques también.

Como os digo, os animo a que os atreváis a dejar a vuestros hijos para hacer una escapada, ya sea más o menos larga (sí, es posible que igual nosotros nos hayamos pasado yéndonos a 10.000 km de distancia, pero otro día quizá os cuente el motivo), pero, de verdad, tanto ellos como nosotros necesitamos de vez en cuando un descanso.

Como siempre dice mi abuela Mamen: "Yo al volver, veía a mis hijos hasta más guapos"





besos a todos!

Teresa


Si quieres más, nos vemos en Instagram!

 

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12 comentarios:

  1. Deseando conocer los motivos. Y muy a favor de la sensatez del punto 1.

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    1. Es que a mi personalmente eso de esclavizar a los abuelos obligandolos a cuidar a los niños todos los días me parece fatal. Y encima dejarselos además en vacaciones, ni te cuento!

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  2. Muy de acuerdo con todo. Nosotros también hacemos nuestros viajes y escapadas cuando podemos y sienta muy bien a la pareja, a lo niños y a los abuelos y tíos que disfrutan mucho más de ellos.
    En mi caso, los abuelos no son cuidadores habituales de los niños así que cuando se los dejamos están encantados!!

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    1. Claro, cuando los abuelos no los tienen todos los días, disfrutan muchísimo de este "intensivo"...aunque creo que también disfrutan cuando nos los llevamos y vuelven a quedarse tranquilos jajaja

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  3. Tiene q ser fantástico estar unos días sin los pekes para disfrutar de algo de paz, en mi caso solo es posible unas horas a la semana y me resultan maravillosas. De todas formas totalmente de acuerdo con tus puntos. Afortunada tu.

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    1. Sí, la verdad es que es una suerte! Es un poco rollo porque en el día a día los tengo a 800 km y no puedo recurrir a ellos, pero luego en vacaciones todos disfrutamos mucho!

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  4. me encanta la frase de tu abuela Mamen

    y me ha encantado esta entrada, aparte de que creo que tu "opinion personal" me gusta, trasmites felicidad de ese viaje

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    1. Mi abuela es que es super top....92 años y tiene la cabeza mejor que yo, el otro día hasta la llevaron a un concierto de Mikel Erentxun y él le dió las gracias por haber ido...como te digo, top!
      Y sí, es que estoy totalmente en contra de "esclavizar" a los abuelos y dejárselos todos los días del año!

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  5. Sería incapaz de dejar a un bebé de menos de un año para irme de viaje de placer dos semanas a diez mil quilómetros de distancia (perdona, pero tu otro hijo no sé qué edad tiene). En primer lugar me parece una irresponsabilidad y más aún que animes a otras madres a hacerlo. Por supuesto que la maternidad agota, y que la vida de pareja pasa a un segundo plano. Pienso que es importante encontrar tus espacios personales, y desconectar de tus hijos de vez en cuando es bueno. Pero todo tiene un límite. Dejar a un bebé con alguien dos semanas, por muchas ganas que tengan de estar con él, es un faenón para el que lo tenga que cuidar. Un bebé no entiende que lo vayas a dejar unos días para irte de vacaciones. Y compensarlo con regalos, ya me parece el colmo. De verdad, me cuesta entender este post.

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    1. Te entiendo perfectamente. Hay diferentes formas de entender la maternidad y la mía tiene dos pilares fundamentales:
      1. La importancia de la pareja como base de la familia: creo en que los niños aprenden los valores que ven en sus padres y nosotros ponemos mucho interés en estar bien como matrimonio, en cuidar nuestra relación y en ser el núcleo solido de nuestra familia. Para eso, necesitamos de vez en cuando intimidad y descansar de la tarea de padres que durante el invierno ejercemos sin ayuda familia.
      2. Los niños no son el centro de la familia, son una pieza muy importante pero deben entender que sus padres, que siempre van a estar para todo lo que necesiten, sean, además de padres, personas.
      3. Educo desde que nacen a mi hijos en la independencia y la autonomía: quiero que sepan adaptarse a distintas situaciones, que sean flexibles, tolerantes, que sepan valerse por sí mismos y que desarrollen sus propias relaciones con los demás sin tener que canalizarlas siempre a través de sus padres. Si te sirve como ejemplo, en las dos semanas que hemos estado fuera, Martín ha ampliado muchísimo su vocabulario, para hacerse entender con abuelos y tíos. Su padre y yo conocemos sus costumbres y entendemos su "lengua de trapo", y al no estar nosotros se ha puesto las pilas y se ha soltado a hablar más.
      Como te digo, hay muchas formas de entender la maternidad y creo que la mía es tan válida como la tuya. Mis hijos se lo han pasado fenomenal, los dos. Desde recién nacidos están acostumbrados a estar con más gente además de con sus padres y nunca han extrañado a nadie. Eso para mí como madre es una tranquilidad, la verdad.

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    2. Mira Teresa, sin ánimo de ofenderte, de verdad. Respeto al máximo la forma en la que entiendes la maternidad, por supuesto, como madres que somos tenemos todo el derecho a elegir como queremos educar a nuestros hijos. Lo que no comparto es que pretendas que los demás sigamos tu ejemplo, porque esa es TÚ elección. Bastaba con que te limitases a explicar tu experiencia. Hay cosas que aconsejas que son muy subjetivas y que no tienen por qué ser lo mejor, aunque a ti te lo parezcan. Porque insisto, cada madre vive la maternidad a su manera. Yo soy madre reciente y me queda mucho por aprender y experimentar. Tengo una hija de 9 meses y me ocupo de ella desde que nació. Estoy disfrutando de esta etapa muchísimo, y eso no quita que también tenga mis espacios para ir al gimnasio, escribir el blog, quedar con mis amigas, y por supuesto hacer cosas con mi pareja, salir a cenar o ir al cine. Ninguno de los dos echamos de menos irnos de viaje solos porque lo hemos hecho millones de veces antes de ser padres y ahora lo que nos gusta y nos apetece es irnos con nuestra hija. Siempre hemos defendido que queremos educarla sin hacerla sentir especial, en ese sentido coincido contigo en que los hijos no pueden ser el centro de todo. Al final lo importante es que crezcan felices y sanos.

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    3. Yo no pretendo que todos los padres y madres se vayan de viaje sin niños...por eso si te fijas antes de mis consejos pone "por si estáis pensando hacer lo mismo pronto". Este es un post para los padres y madres que tienen pensado hacer un viaje sin hijos y buscan consejos basados en la experiencia. No se trata de decirle a nadie que se vaya de viaje ni de decirle cómo tiene que hacerlo, solo contar mi experiencia y dar mis consejos personales para que puedan leerlos y, si les apetece, seguirlos. La verdad es que había hecho ya antes posts para contar mi experiencia viajando CON bebés, que es lo que hemos hecho en otras ocasiones, y me apetecía contar esta viajando sin ellos.

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